La roca en Rosa Chávez
– Pedro Alvarado | ENSAYO–
Breve ensayo sobre el libro Piedra Ab’aj publicado por Editorial Cultura de Guatemala.
Rosa es una de las poetas fundamentales de Guatemala, ella, junto a Calixta Gabriel Xiquín y Maya Cú configuran la trinidad fundadora de la literatura Maya femenina en Guatemala. Rosa es una poeta Maya K’iche’-Kaqchikel que se enfrentó a temprana edad con la discriminación y el menosprecio de la ciudad de Guatemala, cada uno de sus libros es un grito que pide libertad y un trato justo a las personas. En este libro escribe:
Déjame pasar camino,
dejá que esta rabia que desorbita mis ojos
se me salga en palabras dulces…
(pág. 14)
Habla con lo inanimado, con lo que habla en la Tierra de los abuelos, quiere decir ese mundo en palabras miel y en estos tiempos son pocos los sacerdotes mayas que trabajan con miel en vez de azúcar.
Elena me llaman
por mi madre
por mi abuela
acaso no merecía
un nuevo nombre
y crear mis propias desgracias.
(Pág. 18)
Rosa es Elena, una Elena con el mismo nombre, diferente porque sabe usar la palabra, la trabaja, se vuelve la Sacerdote Maya de la palabra, por eso ella misma se vuelve un ceremonial en el poema.
Corazón del aire, estás suspirando.
(Pág. 12)
El corazón del aire no existe como tal en la cosmovisión maya, por eso interpreto que el corazón del aire es parte de la cosmovisión espiritual del individuo, ese que ventila las venas con sangre, que aroma de ceremonia Maya todos los sentidos y el organismo.
Curo con el calor del puj
enseño el respeto por el Tuj…
….ella es la que me presta su mano
ella es mi mamá.
(«La abuela del temascal»)
Tuj, temascal en español, es lugar donde se lavan los cuerpos, se curan los cuerpos, es ese el lugar más íntimo de la casa. No sé si hay oralidad o conocimiento propio, pero Rosa nos trae la verdad de las abuelas y la coloca en el poema, hace ritual la labor de las comadronas, ese silencio que dicen en lengua materna, las plantas medicinales, Rosa reza en el poema eso que no pudo.
La conciencia de la piedra
habla desde su centro
Rosa es la poeta piedra, por eso conoce el lenguaje de las piedras, no necesitó esforzarse para aprenderlo, sabe de la sabiduría de una, palpando su forma y textura, en este libro nos muestra los latidos de su corazón.
Fotografía principal por Alejandra Hidalgo, tomada de La Tinta.
Pedro Alvarado
Licenciado en Filología Clásica, español radicado en San Pedro Laguna. Apuesta a los procesos comunitarios y la autodeterminación de los pueblos.